lunes, 26 de febrero de 2018

DULCE INICIO DE 2018...

El nuevo año fue encarado con todo.


La vida está hecha de momentos. Y si esos momentos son intensamente vividos por los de la familia, se tornan eternos, especiales, vívidos, etéreos... Y pues bien, es lo que decidimos y como lo decidimos encarar.

Al inicio mismo nomás, papá tuvo sus últimas vacaciones en la universidad como decano, puesto que habría de dejar a fines del mes de febrero (¡Yes!), para dedicarse ya como docente de tiempo completo y retornar a sus labores como abogado. Nos preparamos para ir de camping... esa antigua promesa a las niñas que por fin fue cumplida: todos a Yvyku'i, al Parque nacional. Fueron tres días hermosos e inolvidables, en que la familia vivió a cada momento: las noches y sus misterios, el titilar brillantísimo de las estrellas y la noche, las frías aguas del arroyo, los dulces baños por turnos, los platos cocinados en brasero y los jugos naturales, los insectos, las vivencias en la carpa, la audición nocturna de las radios nacionales y por el estratégico espacio, también las radios internacionales, y para las niñas, la visualización mágica de las estrellas fugaces... Todo fue muy especial.

También hemos ido de visita a casa de nuestros parientes, viajando por Encarnación, hasta Trinidad y las Colonias unidas. Viaje de un par de días intensamente vividos. Nuestros mejores recuerdos para las tías Betty, Norma, Blanca, Mario, Augusto, Rubén y Ana... para los primos Rocío, Marizza, y sus hijos, nuestros sobris. Entre estos, conocimos a Anna, la hija mayor de Rocío y el reencuentro con Alex, el ahijado de mamá y papá, hijo de Mario Eduardo y Maribel.

Pero lo mejor de este viaje, ha sido retornar a casa de los queridos tíos abuelos Celsa "Pochó" (+) y Tranquilino (+), padrinos de papá, antigua morada de la bisabuela Matilde Olivera, mamá de la abuela Delia Olivera: lugar de querencias, de bellos recuerdos (revividos con hermosas fotos, compartidas por los primos y tíos), rememorados en medio de un riquísimo asado hecho a las leñas. Se aprovechó para visitar "El monte", totalmente mejorado y el Campo santo, visitando a nuestros seres queridos parientes, quienes ya han partido a la Morada eterna ante El Señor.

Hemos ido luego, a ciudad de Ka'akupe, junto a la Madre de Dios, la Virgencita, a encomendarnos y dar gracias y renovar la fe, ante el inicio pronto de las clases en la escuela, y el inicio de las actividades laborales.

Hemos acompañado de cerca a la tía Raquel y Liosnel, los padrinos de las niñas, y los primos Jessica, Mathías y Christian (¡más una nueva personita!), al abuelo Martín y los tíos Richard, Aldo y Karina más el primito Ezequiel y otras personas especiales, buscando siempre el acercamiento de las niñas a la familia, que es una sóla.

La vida no es eterna. Ellas lo comprenderán.


En el cumple de Clarita (enero de 2018)

Miryan Beatríz y Miryan Estefanía

Estefi
Pizza en verano

Selfie
Camposanto de Trinidad: visita a los antepasados Olivera (panteón)





Los finados tíos Tranquilino y Pochó... siempre juntos

La tía Pochó... ¡Siempre humana, siempre cariñosa!

Don Tranquilino, tomando terere
La finada tía Emi, en el feliz día de su boda



La jovencísima y sorprendente tía Mati, con un papá demasiado pequeño y raro peinado

Gato, el gato de Blanca y Mario (Hohenau, febrero de 2018)

Papá, en el 15 de Vivian Brizueña, compa de Estefi

Selfie de Vivi y la familia

Selfie de Monse y el ñembo barril del Chavo

Selfie en la universidad

Noche de camping... duerme la tropa (¡por fin! Ndokemo'äi voi hikuái... ovy'águi)


6 de enero



Alcanzó a "todas"


Nochevieja... noche nueva...

Selfie de Estefi y papá

Tíos Babi y Sabina... Cada 31 de diciembre, no solo reciben al nuevo año juntos, sino que cumplen aniversario de bodas

Despidiendo el 2017... las Colmán Cañete y cñía.